Seguimos con unos consejos para
intentar llegar un poco más holgados a fin de mes y de paso procurar ahorrar, ni que sea
un poquito.
¿Habéis hecho los deberes?
¿Habéis anotado todo, absolutamente todo lo que entra y lo que sale de dinero
en vuestro hogar?
Para lo que entra no creo que
hayáis tenido grandes problemas, pues sólo hay que sumar lo que ha cobrado cada
miembro de la familia a final de mes.
En cuanto a los gastos… Supongo
que esto es lo que os habrá dado más problemas. Y si os habéis despistado un
poco, si hay algún euro de diferencia porque alguna cosa se os pasó y no la
anotasteis, tampoco pasa nada.
Veamos. ¿De dónde NO podemos
recortar?
-Principalmente de la casa,
tanto si es hipoteca como si es alquiler. Esto no se puede recortar.
-De los seguros y de los impuestos, tanto de la
casa como de los vehículos que tengamos. Tampoco ahí podemos recortar.
-Agua, luz y gas, evidentemente
se tienen que pagar, pero ahí sí que podemos hacer que estos recibos suban lo
menos posible. ¿Cómo? No despilfarrando, gastando sólo lo que realmente
necesitemos. Por ejemplo, en toda la casa debe haber bombillas de bajo consumo, y a poder ser,
de leds. Estas últimas son un poco más caras, pero gastan muchísimo menos que
las de bajo consumo y, según me dijeron en la ferretería donde las compro,
duran toda la vida. ( Eso ya lo veremos…)
Procurad que todas las bombillas
que no se utilicen estén apagadas. Esto parece lógico, pero muchas veces está
encendida la luz de la cocina, del comedor o de una habitación, cuando en
realidad ya tenemos bastante luz para ver lo que hacemos. Y si en el comedor
hay una lámpara con tres, cuatro o más bombillas, es tan fácil como desenroscar
alguna. Seguro que no necesitamos tantas.
La tele… La caja tonta… Conozco
mucha gente que al llegar a casa lo primero que hacen es conectar la tele. ¡Y
no la miran! Es sólo por esta especie de ruido de fondo que nos proporciona y que
parece que nos acompaña…
Cuando comemos o cenamos,
¿Prestamos atención a la tele? No. Pues se apaga. En realidad la tele sólo
deberíamos conectarla para ver algo en concreto y prestarle atención. Las
noticias o algo de entretenimiento por la noche. El resto del día puede estar
apagada. Así, de paso, podremos aumentar un poco el rato que dedicamos a hablar
en casa con la familia.
Móviles, ordenadores, táblets,
mp3, mp4, y no sé cuántos chismes más… El primer problema que se nos plantea es
el de tener bien claro cuál de estos aparatos necesitamos PARA VIVIR, y de cual
o cuales podríamos prescindir.
Seguro que nos sobran la mitad
de todos estos aparatos. Y otra cosa. El móvil lo podemos considerar como
necesario, pero… ¿Necesitamos un móvil de última generación, con conexión a internet, que haga fotos
de alta resolución, con más capacidad de almacenaje que los ordenadores de la
NASA, con radio, con… no sé qué más?
¿Necesitamos que nuestro
TELÉFONO tenga todo esto, o necesitamos un aparato que nos sirva para
telefonear? Pensad en lo que cuesta un aparato de última generación y, sobretodo,
en lo que pagáis cada mes de cuota.
El agua. También aquí podemos
recortar bastante. Y no estoy hablando de ducharnos sólo una vez a la semana,
ni de no lavar la ropa o los platos. Pero, por ejemplo, en la ducha, cuando nos
enjabonamos el agua cerrada. Si somos de los que nos duchamos cada día, o casi
cada día, la ducha no puede durar media hora. ¡Que no vamos tan sucios! Con
cinco o seis minutos hay suficiente. Una enjabonada ( con el agua cerrada ) y
el agua justa para quitar el jabón.
Cuando nos lavemos los dientes,
con un vaso, y el agua no debe correr.
Un truqui: Cuando vayamos a ducharnos,
la primera agua que sale es fría ¿no?, pues se puede aprovechar. En lugar de
dejarla perder por el desagüe hasta que salga caliente, se llena un cubo y
luego se aprovecha para el wáter, por ejemplo.
Las lavadoras bien llenas, igual
que el lavaplatos. Y si lavamos a mano los platos, se hace con barreños, y esta
agua también sirve para el wáter.
¿Qué más podemos recortar o
reducir?
¿Fumáis? ¿Sí? Pues… Ya sabéis de
donde podéis recortar mucho gasto. Y según lo que fuméis, la cantidad y cuántos
fuméis en la casa, si dejarais de fumar podría suponer un buen respiro para
vuestra economía. Y si no, contad todo lo que os gastáis en tabaco en un mes.
Sorprende, ¿Verdad?
Y os aseguro que no es ninguna
locura que os planteéis dejar de fumar. Tal vez este sea el mejor de los
motivos para dejar el tabaco.
Bien, creo que por hoy ya hemos
reducido bastante esos gastos. Con estos simples consejos podréis ahorrar
bastante, o como mínimo llegar a fin de mes con un poco más de tranquilidad.
Parece bastante coherente...
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